Una nueva subvención de 2.7 millones de dólares de los National Institute of Health (NIH) de Estados Unidos, apoyará una red de sitios de investigación en Latinoamérica para estudiar las características clínicas de un gran grupo de personas con síndrome de Down. Este proyecto titulado “Trisoma Humano: Red Latinoamérica” está liderado por el Instituto Linda Crnic para el Síndrome de Down del Anschutz Medical Campus de la Universidad de Colorado, y es parte de un esfuerzo mayor lanzado por los NIH, conocido como el Programa de Desarrollo de Cohortes de Síndrome de Down (ES-CDP).
El programa tiene como objetivo estudiar a las personas con síndrome de Down, desde el nacimiento hasta la edad adulta, con un detalle sin precedentes. El proyecto latinoamericano, dirigido por el Dr. Joaquín Espinosa, busca comprender cómo la raza, etnicidad, geografía, dieta y factores socioeconómicos influyen en el desarrollo y las características clínicas de las personas con Síndrome de Down.
El estudio reclutará a participantes de Chile, además de otros países como Colombia, Brasil, Argentina y Mexico. Todos los participantes utilizarán un protocolo común para recopilar datos clínicos y muestras biológicas, lo que permitirá realizar comparaciones entre diferentes poblaciones y obtener información comparable entre las distintas realidades territoriales. Este estudio representa un paso crucial hacia una mejor comprensión del Síndrome de Down y el desarrollo de tratamientos más específicos y efectivos.
“La inclusión de una población latinoamericana diversa permitirá obtener información valiosa sobre las necesidades y desafíos particulares de esta comunidad”, comenta el doctor Espinosa. Además destaca la importancia de la inclusión de la población latinoamericana: “Los latinos son el grupo de población con Síndrome de Down de más rápido crecimiento en Estados Unidos, y tenemos aún mucho por aprender de la diversa población de personas con Síndrome de Down en el cono sur”.
Para la Dra. Macarena Lizama, académica de la Facultad de Medicina de la Pontificia Universidad Católica de Chile y directora del Centro UC Síndrome de Down, “esta es una oportunidad única para el Centro, la UC y para Chile, y ser parte de este esfuerzo colaborativo para comprender mejor las necesidades de las personas con síndrome de Down en nuestro país, permite contribuir a la investigación de frontera y aplicarla a nuestra realidad”.
Para las y los cientificos involucrados en el proyecto, hay un importante trabajo por hacer para asegurar que el protocolo de investigación pueda ser implementado en múltiples idiomas y con las adaptaciones culturales apropiadas. “La población latina no es un grupo monolítico, y Latinoamérica es, sin duda, una de las áreas geográficas más diversas del mundo”, dice Angela Rachubinski, profesora asistente de investigación en pediatría del proyecto.
En la misma línea, el Dr. Arturo Borzutzky, líder científico del sitio chileno, director del Laboratorio de Inmunología y Alergia Traslacional UC, donde se instalará el biobanco chileno comenta que, “el desarrollo de una cohorte clínica y biobanco con datos originados en población chilena, abrirá oportunidades para plantear estudios específicos y responder preguntas clínicas que nos ayuden a acompañar de mejor forma los desafíos en salud que nos proponen las personas con síndrome de Down”.
Gestión de Prensa: Centro UC Down